Artículo del Inspector S.M.G. @ElMundoDeDantes
No hace muchos años, Ignacio Cosidó, entonces Director General de la Policía, presentaba la Policía 3.0, esa Policía Nacional del futuro, digital, universitaria, moderna y cercana. Olvidó decir que también sería la Policía de las equivalencias. De las dichosas equivalencias, esos reconocimientos académicos, siempre rodeados de polémica y que no pocas veces, debido a las dudas sobre su oficialidad y validez, terminan en los tribunales en forma de contenciosos.
Tras 24 años en este cuerpo, y con unos cuantos ascensos a mis espaldas, con sus correspondientes cursos de formación y capacitación, acumulo hasta tres equivalencias, sí, tres. Equivalencia a Técnico Superior de la Administración, equivalencia a Grado Universitario oficial y equivalencia a Máster universitario oficial. Tres mallas curriculares distintas, docenas de créditos ECTS, y no se cuántos planes de estudios, y a nadie se le ha ocurrido, que quizás, ahora que la Policía Nacional cuenta con un Centro Universitario propio, se deberían articular los mecanismos administrativos oportunos para homologar las equivalencias y otorgar a esos policías, que se cuentan por miles, la titulación oficial correspondiente.
Quién sabe, de momento, y viendo cómo funciona este bendito cuerpo, aún tengo tiempo de sacarme la equivalencia a doctorado universitario. O puede que mañana, alguien decida que las equivalencias no tengan validez para ascender y pasen a ser simple papel mojado.
Así es nuestra policía, la de las equivalencias
